Este es un relato real, por eso no es corto. Mi tremenda fogosidad inicio desde muy niña, por ver a mi vecina tener sexo con varios hombres, la primera escena sexual me impacto la vida por completo, suerte que no quede traumada (escuche que hay casos de niños que al ver sexo en vivo desarrollan tartamudez o algun tic, o parafilia despues) aunque quizas si quede con una obsecion: placer – pene.
En ese entonces yo tenia 7 años, naci muy blanca y de cabello castaño claro, ojos pardos y un lunar algo grande al costado de la boca y otro debajo del ojo (hay un dicho conocido “lunareja pendeja’) mas adelante me describiria asi, una pendeja total.
Bueno habia yo cabado el año escolar, y por vacaciones me mandaron con una tia, su esposo, y sus 3 hijos varones mayores que yo por unos cuantos años mas y una prima mayor por 1, dicha familia solo iba de vacaciones a esa casa casi campestre por menos de 3 meses; el lugar quedaba a unas 4 o 5 horas de Lima la capital, fuera del bullicio, trafico y desorden del dia a dia citadino costeño, a un lugar tranquilo, pequeño, casi Sierra, hacia algo de frio pero con algo de sol y cielo casi despejado, era como una mini-Lima (pero sin trafico).
La casa de mi tia estaba encerrada con otras pocas casas mas dentro de un vecindario muy bonito, cada casa tenia un gran jardin trasero, y uno delantero, tenia zotano y atico, era estilo americano, afuera estaba la plazuela, tiendas, municipio etc. Nuestros vecinos si vivian ahi todo el año, no recuerdo cuantos eran, solo recuerdo a la hija que en ese entonces tendria unos 16 a 20 años como máximo, cabello negro ondeado largo, pestañas pobladas, blancona, y cuerpo de sirena, bonita, su cuarto daba hacia un desposito donde mi tia guardaba una maquina de coser antigua, latas de hilos, bolas de lana etc., nadie lo usaba, solo yo, que me la pasaba horas viendo a mi vecina seducir a hombres de todos los colores y edades, era un cine en vivo; esa chica exhibicionista fue la culpable de que hoy en dia yo disfrute del sexo como si fuera la gloria o la ultima coca cola del mundo.
La primera vez que vi a mi vecina en acción fue por casualidad, estaba mi tio en la cocina desayunando tarde, yo le pregunte si tenia jueguetes o alguna pelota y el me mando al deposito para entretenerme con los ilos y cajas que habia ahi, pero en realidad el queria que me vaya y lo dejara solo con la empleada, la cual el no dejaba de mirar mientras la muy piruja trapeaba el piso en cucliyas con las piernas abiertas.
Ya en el deposigo abri las cortinas y la imagen del frente fue algo chocante, al comienzo no comprendo que estaba viendo pues jamas en mi vida habia visto ni el television a nadie desnudo, y no recuerdo ni haberme visto a mi en el espejo, frunsi el seño porque no comprendia, solo habia una masa enorme de carne y cabello, luego vi que era una jovencita y un muchacho desnudos abrazandose, hasta que de ver mas pude ver lo que ni si quiera sabia en nombre “sexo” parecia algo violento, una matanza, un asalto, y al mismo tiempo algo suciamente perverso, vi las tetas enormes de Diana “ohh Diana Diana siii Diana ohhh gritaba el chico” ella estaba tumbada en la cama que estaba pegada a la ventana con las cortinas abiertas de par en par, y el chico pegado a ella, se separo y se sento en la cama viendole fijamente la vagina, sujeto sus tobillos y los levanto abriendole las piernas “mierda Diana humm” y ella sonriendo con una cara de muy traviesa, el le alzo de los tobillo y arrodillado en la cama apoyo sus nalgas colgantes en sus rodillas, luego solo sus tobillos y la agarro de las nalgas levantandole el culo a la altura de su boca, ella seguia con las piernas abierta algo flexionadas, era muy elastica, el se agacho un poco y hundió su cara en esa vagina, se la lamia como si lamiera un plato, como si fuera una paleta, se tragaba lo que saliera de ahi, al mismo tiempo este muchacho gemia muy fuerte, como si se volviera loco, seguia y seguia, le mordia los labios y se los estiraba un poco, (es maravilloso cuando nos dan sexo oral, me encanta ver una lengua grande lamiendome la vagina, chupandome y tragándose mis jugos, una que otra mirada de mi chico mientras lo hace y me vuelve loca, pagaria por que me la chupen por horas, chicos nunca dejen de hacerlo, chupen nuestras vaginas como si chuparan un caramelo) …. luego de eso el la solto y quiso acomodarse para hundirsela pero ella lo empujo un poco y se sento sobre el, lo cabalgo muy rapido y arqueandose se aplastaba contra su vientre, el gemia casi gritando y yo creo que a ella la podian escuchar desde Lima, luego de un rato ella tembló rapidisimo como si le dieran una descarga eléctrica y el grito “mierda me voy a venir Diana me vengo!” Y luego ella se acosto a su lado abrazandolo, pude su cosa aun parada (me encanta quedarme viendo una buena pinga erecta, lamerla, mirarla, metermela a la boca y mirarla para luego continuar hasta sacarle su lechita, que placer) el chico la abrazo y yo me sente en el piso, senti mi vaginita por primera vez, me habia excitado y mojado los calzones, me sentia sucia, y exitada, pero siempre regresaba a ese deposito por mas, vi a un negro, a dos chicos, una morena y a mi tio desfilar por la habitación de Diana, ella era el sexo en vivo, senti millones de cosas ahi espero les haya gustado, contare mas cosas pronto.